La vida es el camino del cielo al infierno.

Tan fácil como decir que de niños somos muy inocentes, absorvemos y aprendemos de todo lo que nos rodea y... como este mundo es así, nos convertimos en verdaderas criaturas demoníacas. Tan solo basta con una mirada a los ojos para darnos cuenta de esto.
Es una lástima vivir en este mundo en el que estamos condenados al fracaso moral.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Ya no es que sea fracaso moral, sino que hay gente que ya viene fracasada de casa y no hace nada para remediarlo.

Anónimo dijo...

No te pega nada lo de la moralidad. Señorita inmoral que no paga las cervezas a los amigos. ;)

Rareza dijo...

Tienes razón, a ti te pega más eso de la moralidad... ¿o es miedo a que te haya superado intelectualmente?